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Alójese en los hoteles y resorts de Insotel Hotel Group situados en Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera y disfrute de unas vacaciones inolvidables.
Le proponemos cuatro destinos de lujo con los servicios más exclusivos y personales y la posibilidad de disfrutar de las más fascinantes calas y playas del Mediterráneo.
El nombre de Mallorca responde a una tierra de olivos y molinos, de diversión y calma y, sobre todo, de hermosas playas del Mediterráneo. Mallorca mantiene intacto su encanto y es elegida cada año por millones de turistas. En las calas y playas de Mallorca el tiempo parece desvanecerse. Es Trenc, Cala Domingos, Cala Mondragó, Cala Mandía… son sólo algunas de las playas que descubrir.
Mallorca es un tesoro repleto de encantos y de rincones milenarios de gran belleza. Además de playas, ofrece un sin fin de posibilidades, una espléndida arquitectura gótica y lugares tan atractivos como la Catedral de Palma, el Castillo de Bellver, Formentor, Sa Calobra...
Bienvenido a Menorca, la isla de la tranquilidad, de sus verdes campos, del hermoso azul de sus aguas y del blanco de sus encaladas casas.
Su gran riqueza ecológica y paisajística en sus 216 kilómetros de costa, la convierte en el territorio de mayor riqueza natural del Mediterráneo.
Prueba de ello es que la isla goza de la declaración de Reserva de la Biosfera por la Unesco.
Es sin duda la isla más seductora del mar Mediterráneo. En ella se puede disfrutar de playas y calas de ensueño, de hermosos paisajes naturales y de una luz que crea una atmósfera muy especial. Además de su arrebatadora magia, Ibiza alberga numerosos tesoros culturales considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco como Sa Caleta, Dalt Vila o la Necrópolis de Puig des Molins.
Playas únicas, pueblos blancos, mercadillos hippies, las mejores discotecas del mundo…
Ibiza le invita a disfrutar de su magia, tanto de día como de noche.
Si busca paz, tranquilidad, relax… Formentera es la mejor opción, un destino sencillamente único. Es el paraíso perfecto para enamorarse del Mediterráneo. Las hermosas tonalidades de su mar despliegan colores turquesa, celeste, verde y azul oscuro, siempre bañados por la luz que ilumina las magníficas playas de Formentera.
La suavidad de la isla permite entender la magia que despierta en todos los viajeros que la visitan. Formentera siempre mira al mar y desde entornos tan incomparables como Playa Migjorn, Espalmador o Illetes es imposible no sentir la isla como parte de uno mismo.
